La Masoneria en Arroyo

FUNDACION E HISTORIA DE LA RESPETABLE LOGIA IRIRS DE PAZ NUMERO 13 DE LOS VALLES DE ARROYO

(Tomado de la revista 125 aniversario)

La masonería en Puerto rico en el siglo XIX fue perseguida por los Gobernantes de turno durante el régimen español que gobernaba en la Isla en la época. Aunque algunos gobernantes eran tolerantes, las logias masónicas abrían sus puertas o celebraban reuniones más o menos cautelosas. En algunas ocasiones celebraban actos públicos y no eran molestadas. Pero la mayor parte de las veces la masonería era perseguida. Sus logias fueron clausuradas y buen número de sus afiliados sufrieron arrestos y encarcelamiento.

Hasta donde se tiene conocimiento, el nombre de Iris de Paz se remonta hasta el año 1873 donde en la playa de Ponce el Gran Oriente Nacional de España fundó una Logia con este nombre, pero ésta, al igual que otras diez, desaparecieron con motivo de la caida de la República Española en el año 1874. El 25 de octubre de 1884, el Muy Respetable Hermano Santiago R. Palmer, consiguió que la Gran Logia de Cuba estableciera una Gran Logia Provincial en Puerto Rico.

El 4 de febrero de 1885 en reunión a la que concurrieron ocho (8) hermanos, se establece en la localidad de arroyo una nueva logia bajo la inmediata obediencia de la Gran Logia Provincial de Puerto Rico y de la Jurisdicción de la Muy Resptable Logia Unidad de Colón e Isla de Cuba. Fue el primer paso elegir Presidente y Secretario "Ad-Hoc" a los Hermanos José Méndez de Córdova y Luis Bossolo; se acordó que la nueva logia llevara por nombre Iris de Paz, se designaron como dignatarios y funcionarios los siguientes Hermanos: Venerable Maestro - José Méndez de Córdova, Primer Vigilante-José Ramón Gómez, Segundo Vigilante-Juan F. Asilux, Secretario-Luis Bossolo, Tesorero-Alfredo Salgado, Maestro de Ceremonia y Limosnero- Luis Ramú, Primer Diácono-Gaspar Escott Cintrón, Segundo Diácono-Mariano Canales, siendo incluida entre las primeras que fueron a formar parte de la dicha Gran Logia Provincial.

El 15 de julio de 1885 La Gran Logia de Cuba cedióel territorio de Puerto Rico para que este constituyera su propia Gran Logia, Iris de Paz pasó a formar parte de esta Gran Logia al fundarse bajo dispensa, en reunión celebrada el 11 de septiembre de 1885 y después de haber cumplido con la Constitución y los estatutos, así con todas las leyes y decisiones de la Muy Respetable Gran Logia Soberana de Puerto Rico, Iris de Paz solicitó la Carta Patente que la autorizaba como Constituyente de la Muy Respetable Gran Logia Soberana de Libres y Aceptados Masones de Puerto Rico.

Quisieramos recalcar que jamás abatimos columna, aunque no aparecen documentos entre los años 1888 y 1889, sabemos que esto se debió a que el ciclón San Ciriaco que azotó la isla el 8 de agosto de 1899, arrasó por completo nuestro templo con todo lo que en el había, muebles, enseres, decorado, archivos, etc., sustenta estas aseveraciones la arta que le dirigiera el Venerable Maestro Francisco Virella Uribe al Muy Respetable Gran Maestro Carlos B. Meltz en mayo 10 de 1900, contestándole la suya fechada de 5 de mayo del corrientea año.

Para beneficio de éstos y para la historia de nuestra Logia, repetiremos algunos trazos y citamos: "Esta Logia Iris de Paz no esta muerta como usted se figura, al contrario, tiene vida robusta y activa, a pesar de los muchos reveses y contratiempos que hemos sufrido... Lo que pasa en primer lugar, que desde el ciclón del 8 de agosto último que arrasó por completo nuestro templo con todo lo que había en él, muebles, enseres, decorados, archivos, etc., hemos venido trabajando en compañía con miles dificultades"...

Mis Hermanos, esta es la historia de la fundación de nuestra Logia iris de Paz Número 13.

Al igual que los miembros fundadores que hemos mencionado, queremos testimoniar nuestro agradecimiento y gratitud a los siguientes Ex-Maestros, paladines de nuestra Logia y de la Masonería Universal. A los Venerables Hermanos Federico Virella Uribe, Francisco Virella Uribe, Marcos S. Bassora, Juan B. Huyke, Valerino Villera Uribe, como también a los ilustres educadores Hijos de la Viuda y miembros de Nuestro Taller, quienes dieron mucha luz en la Masonería y en la vida cotidiana: Don Enrique Huyke, Bernardo Huyke, Cristóbal Sánchez y Alejandro Salgado.

Todos ellos descansen en el eterno oriente. Vaya nuestra Gran Gratitud.

                                                                                                      Miguel A. García Mariani

                                                                                                              Historiador